El camino de la vida es ante todo un carrusel de emociones y la sucesión de etapas vitales. De joven, seguí este camino con determinación y curiosidad por el mundo. Sin embargo, este camino también tiene uno o dos obstáculos que debemos superar. Uno de estos obstáculos fue probablemente el hecho de que me negaran una carrera en arte y diseño en Alemania. Más tarde contrarresté este hecho con protestas viviendo al máximo mi lado creativo, a pesar de la injusticia de que no se me permitiera ejercerlo como profesión, y sigo haciéndolo. Esta es la razón por la que algunas de mis obras están repartidas por todo el mundo, ya que prefiero regalarlas a mis amigos.

Como dice el refrán: "Quién sabe para qué sirve". Lo dejaré así... ¡nadie lo sabe! El trabajo anterior, que luego retomé, también me posibilitó muchas cosas. Pude conocer a mucha gente encantadora en mis viajes, tuve la bendición de tener a mi hijo, viví muchas experiencias maravillosas y pude realizar muchos de mis proyectos artísticos.

Otro dicho: "Hay que aceptar la vida tal como es". Yo diría que hay que vivir y vivir la vida. Para ello se necesita una mezcla adecuada de tenacidad, determinación, ligereza, serenidad, pasión, sed de aventura y amor. Pero de vez en cuando hay que rebelarse y hacer valer agresivamente la propia voluntad y ¡darle la tabarra al "navegante del camino de la vida"!

Creo que hay que seguir adelante. Por eso es tan apropiado que mi actual compañero de vida me llame su "gorila". Siempre en movimiento y con mucha energía.

Por último, otro dicho: "No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Para mí, eso significa: "¡Vive tu vida ahora!". No tiene sentido no hacer algo o dejarlo para la vejez... ¡ponte en marcha!

Por último, otro dicho: "No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Para mí, eso significa: "¡Vive tu vida ahora!". No tiene sentido no hacer algo o dejarlo para la vejez... ¡ponte en marcha!

Mis raíces artísticas